Llevo poco más de una semana por Helsinki (Finlandia), en la pequeña isla de Suomenlinna , a 15 minutos en ferry del centro de la ciudad. Un sitio como de cuento, muy bonito, Patrimonio de la UNESCO, con una población de unos 600 habitantes todo el año. Estoy residiendo en uno de los estudios del HIAP, prestigiosa institución finlandesa para el intercambio internacional de artistas.
El estudio está ¡genial!...muy, muy bien. Es un loft, con bastante altura, luminoso, todo blanco y conservando la estructura de ladrillo antiquísimo de la arquitectura original. Muy confortable (agua caliente, buena calefacción, cocina con todo, baño completo, camas para invitados, terraza y conexión a Internet). Para los residentes tenemos un cuarto con lavadora y plancha y además, el HIAP tiene aquí una oficina donde nos facilitan toda la ayuda técnica y estratégica que necesitemos. Por si fuera poco, me han facilitado un teléfono móvil y una bicicleta (muy útil en la isla y por el carril bici de toda la ciudad).
Por ahora el tiempo acompaña, lo cual ayuda bastante a que la adaptación sea más fácil. Hemos tenido días de verdadera primavera española con sol y calor. Pronto cambiará.
Ya me ha dado tiempo a hacerme una idea bastante aproximada de lo que se cuece por aquí en el plano artístico. Entrevistas con artistas, directores de asociaciones de artistas, galeristas , gestores culturales, profesores de universidad, etc; inauguraciones de exposiciones en galerías , ferias de arte ( Art Helsinki 10 y Art Fair Suomi 10) y hasta una inauguración en el Kiasma que es como el Reina Sofía de aquí.
Sinceramente, aunque hay de todo, creo que a nivel artístico (en el plano creativo) no nos ganan…no he visto nada que me haya sorprendido especialmente. Eso sí, a nivel organizativo (¡que se vayan preparando en España!) nos llevan una clara ventaja. Y en diseño sí que son bastante buenos.
Tengo que decir, que para mi proyecto estoy teniendo todo el apoyo por parte de la Embajada de España en Finlandia. En concreto por parte del Encargado de los Asuntos Culturales, que, ya desde la fase de preparación del mismo en Madrid, me está ayudando continuamente. Cosa que no puedo decir de las instituciones españolas. Aquí me he venido sin el apoyo solicitado por mi parte al Ministerio de Cultura, a Matadero Madrid y a la Comunidad de Madrid. Nada. Debe ser que este señor, con el aire fresco, tiene la mente más despejada y ha sabido ver desde un principio las estupendas posibilidades de futuro que, para ambos países, puede tener el proyecto. En fin…es lo que hay.
Bueno, por ahora esto es todo. Sigo adelante. Con mucho trabajo pero animado y con buenos resultados por ahora.
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